OMEGA-3 PUEDE AYUDAR A REDUCIR LA INTENSIDAD DE UNA RESPUESTA INFLAMATORIA

OMEGA-3 PUEDE AYUDAR A REDUCIR LA INTENSIDAD DE UNA RESPUESTA INFLAMATORIA ("TORMENTA DE CITOQUINA")

Los ácidos grasos antiinflamatorios Omega-3 DHA y EPA ayudan a nuestro cuerpo a (1) controlar la intensidad de la inflamación, (2) detener la inflamación y (3) reparar el tejido celular dañado después de una inflamación.

Un exceso de ácidos grasos Omega-6, especialmente el ácido araquidónico (AA), produce la producción de compuestos proinflamatorios en nuestras paredes celulares y son los principios detrás del proceso de inflamación en nuestros cuerpos.

Nuestro mecanismo regulador natural, que controla un proceso de inflamación, solo puede funcionar y protegernos si nuestra dieta está equilibrada entre los ácidos grasos Omega-6 y Omega-3. La composición de ácidos grasos de nuestra dieta se refleja en las células de nuestro cuerpo.

Desafortunadamente, nuestra dieta moderna contiene de 20 a 40 veces más Omega-6 proinflamatorio que los ácidos grasos Omega-3 antiinflamatorios. Para lograr una dieta equilibrada con estos ácidos grasos esenciales, debemos reducir los alimentos ricos en Omega-6, como la carne roja, los huevos y los productos lácteos, y aumentar su consumo de omega-3 al comer más pescado graso como la sardina, anchoas, salmón y atún.

Además, elegir un suplemento de aceite de pescado omega-3 de alta calidad (preferiblemente con vitamina D3) lo acercará a este equilibrio deseado y ayudará a reducir la intensidad de una respuesta inflamatoria excesiva.

Los suplementos de omega-3 de alta calidad aumentan la concentración de EPA y DHA en las paredes celulares. Estos son altamente efectivos contra muchos trastornos inflamatorios crónicos tales como; artritis, dermatitis, enfermedad del intestino irritable, aterosclerosis, dermatitis (psoriasis), y demencia.